Así como los españoles (y europeos en general) se han interesado en las peculiaridades del vino, cada vez más personas se sumergen en el fascinante mundo del aceite de oliva virgen extra y sus aplicaciones gastronómicas. Aunque las catas de AOVE no son tan populares como las del vino, están ganando adeptos gradualmente. En este artículo, te contaremos qué aspectos tener en cuenta al realizar una cata de aceite de oliva virgen extra.
Como mencionamos en un artículo anterior, reconocer la calidad del AOVE no se limita a un análisis físico-químico, sino que una evaluación completa requiere un análisis sensorial u organoléptico. Los expertos encargados de este análisis son los sommeliers o catadores oficiales, quienes mediante una cuidadosa cata evalúan los siguientes factores:
Olfato: En esta etapa, el catador valora los aromas presentes en el aceite de oliva virgen extra y su intensidad. Pueden percibirse notas a plantas, hierba, flores, frutas, y también detectar si presenta algún olor no limpio o con defectos.
Gusto: El catador debe identificar el sabor desde el momento en que el aceite toca el paladar, y también evaluar el regusto que queda en la boca después de la primera impresión. Se evalúa cómo afecta a las cinco áreas de sabor en la boca, incluyendo notas de amargor, picor, astringencia y fluidez.
Armonía: Tras experimentar las sensaciones del gusto, el catador debe evaluar el equilibrio entre la sensación retronasal, la persistencia en la boca y el balance general del aceite.
Vista: En una cata profesional, se utilizan vasos de color azul oscuro para que la apariencia no interfiera en las valoraciones de los otros sentidos. El catador anota las características visuales del aceite, como su brillo, transparencia, oscuridad o turbiedad, así como el color que puede variar entre amarillo, amarillo-oro, amarillo verdoso, verde o verde intenso.
Valoración final: Luego de puntuar cada una de las áreas mencionadas, el catador procede a la valoración final del aceite de oliva virgen extra, clasificándolo como lampante, virgen o virgen extra. En caso de ser virgen extra, se categoriza como bueno, muy bueno, excelente o sobresaliente.
En La Redonda, nos enorgullecemos de ofrecerte un aceite de oliva virgen extra de máxima calidad, obtenido de nuestros propios olivares y prensado en frío para conservar su frescura y sabor. Nuestro AOVE arbequina ha sido reconocido en catas internacionales por su excepcional calidad y sabor auténtico. Descubre los beneficios de incorporar nuestro AOVE en tu cocina y disfruta de la experiencia de una cata de aceite de oliva virgen extra con La Redonda. ¡Explora nuestros productos y sumérgete en el apasionante mundo de los AOVEs de calidad superior!
